**
Esto es lo que nos ha escrito Alberto, de 14 años:
Mis padres me dieron permiso para abrirme una
cuenta en facebook hace un año. Recuerdo que me sorprendí mucho de la
cantidad de solicitudes de amistad que recibí tan pronto como abrí la cuenta.
Al principio me hizo mucha ilusión, pero enseguida me di cuenta de que no
conocía de nada a la mayoría de esas personas. El problema llegó cuando empecé
a recibir mensajes privados de algunos de esos desconocidos. Los borré de mi
lista de amigos inmediatamente. Fue entonces cuando me di cuenta de los
peligros de las redes sociales...
**
Y mirad lo que nos ha dicho Juan... ¡me encanta que te hayas echado novia por el facebook! Por una vez, tenía que salir bien... ;)
Yo no sé si las redes sociales son
peligrosas o no, pero yo conocí a mi novia a través de Facebook.
Teníamos muchos amigos en común y un día nos intercambiamos un par de mensajes.
Poco a poco fuimos aumentando la frecuencia de los mensajes, hasta que un día
saltamos a los emails directos. Pasados unos meses, coincidimos en una fiesta
de esos amigos comunes y dos semanas después estábamos saliendo juntos. No sé
si las redes sociales entrañan peligros, pero en mi caso han sido absolutamente
beneficiosas’.